Es sencillo detener la canción que agarra mis manos, se enreda en mi mente y me arrastra al abismo, tanto como no escribir cuando sé que es mejor no hurgarme por dentro. Y sin embargo, la música suena mientras escribo con sangre en mi viaje a ese otro lugar. Porque es sencillo, sí, pero también imposible.
Suena en mi cabeza, insistente, esta frase de mi querido Diego Cantero "Funambulista":
Noviembre es siempre triste
No hay comentarios:
Publicar un comentario